PUERTO PLATA. – Fue sepultado la tarde del pasado jueves un reconocido hombre de incidencia en esta ciudad, quien se desempeñó en el arte de la ebanistería y el comercio, regenteando una cafetería.
Harry Gilbert, casó con la señora María Luisa Elivo, no procreó hijos, pero sin embargo, más de 20 personas fueron criadas por ellos desde pequeños como hijos propios.Se distinguió como uno de los ebanistas dominicanos de mayor calidad, junto a su hermano Caly Gilbert -ya fallecido- Henrry Benz y otros, siendo uno de los hombres que construyó la mayoría de los bancos y puertas en caoba que se encuentran aún en la Catedral San Felipe y otros templos religiosos y residencias coloniales.Puerto Plata perdió con su partida, uno de sus símbolos de trabajo, honestidad, decencia y solidaridad más auténticos.
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