Es más que evidente que está en marcha un plan dirigido a desmeritar al Presidente Leonel Fernández, la figura de mayor relevancia en el país, durante las ultimas décadas.
Desde determinados litorales de la comunicación, que responden a intereses politiqueros, se ha intentado clavar dardos sobre el mandatario y su estilo de gestión.
Este plan malsano se desarrolla en dos vertientes: en primer lugar reducir las posibilidades electorales del Partido de la Liberación Dominicana, que lidera Fernández, y por ende de su candidato presidencial para 2012, Danilo Medina.
En segundo término, se pretende reducir al mínimo las potencialidades de Leonel Fernández, en tanto principal líder del país, y activo electoral con muchas posibilidades de retornar a la jefatura del Estado en futuros procesos comiciales.
Sin embargo, los detractores del Presidente, al parecer no han valorado lo difícil que les resultará concretar sus planes en contra del PLD y su principal líder Leonel Fernández, así como de su candidato Danilo Medina.
Olvidan o pasan por alto que existe una verdadera sintonía entre el estilo de gobierno de Leonel y las nuevas generaciones, es decir, los jóvenes, un sector determinante en el curso político de la nación.
Para muestra más fehaciente, basta un botón: la habilitación de numerosos Centros Regionales de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, que conlleva una revolución en la educación superior servida por el Estado.
Con razón, Leonel Fernández es llamado el “Presidente de la UASD”, por que hay que agregar la transformación y modernización de toda la planta física de la academia en la Capital, que incluye la habilitación de nuevas áreas, como Biblioteca, Edificio Administrativo, Hospital Oncológico Universitario, Comedor y Edificio de Estacionamiento.
Pero más Allá, en la actualidad resulta difícil moverse por cualquier territorio urbano, suburbano o rural de la República Dominicana, sin percibir la obra portentosa que aporta el Presidente Fernández.
Carreteras, Hospitales, Elevados, Túneles, Puentes, Proyectos Habitacionales, por doquier, constituyen el principal testimonio de que Fernández llegó al poder para hacerse sentir y dejar plasmado su lugar preponderante en nuestra historia reciente y de cara al futuro.
Hay que poner de manifiesto, además, los grandes aportes motorizados por Leonel en el aspecto institucional, sobre todo al impulsar la Constitución en vigor, la más participativa y moderna de toda nuestra historia.
Pero también ha sido el artífice de los cambios institucionales en el Poder Judicial, el Ministerio Público, el Congreso y a esto debemos sumar la participación activa del país en la agenda internacional, mientras antes estuvo aislado de ese concierto.
En fin, el Presidente Leonel Fernández entra a su último año de gestión en el presente periodo, con una impronta que motiva el agradecimiento de todo un país, y con proyecciones de continuar y acrecentar su enorme incidencia sobre las masas, sobre todo al momento de que la población deberá tomar las grandes decisiones que le depara el destino.
Joel Henríquez
twitter: @Bendecido12 Correo: jhenriquez@rdplus.com.do
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